Lejos quedaron los días en los que este blog tenía una actividad cotidiana, que era más una búsqueda constante de algo que intentaba tomar forma, sin lograr redondear en un esquema o propuesta concreta.
Finalmente, después de un tiempo, llegó Villa María Vivo!, la web en la que ahora estoy sumergido y a la que le dedico las horas -y más- que antes eran provecho de este blog.
Salvo mi cuenta de Twitter, y ocasionalmente la de Facebook, todo registro digital pasa la la web citada.
Allí nos vemos.
Salute!